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Julio Lamas junto a Ale Ambort, hace unos días en San Vicente. |
Alejandro Ambort - En la elite del básquet europeo dirigió
al Real Madrid y sin escalas llegó a nuestra ciudad en el año 2004
para hacerse cargo del plantel mayor del club Sportivo Ben Hur. Con
la BH se consagró como el mejor campeón de todos los tiempos de la
Liga Nacional de Básquet (46 partidos ganados – 9 perdidos) en
2005 y al año siguiente como campeón de la Liga Sudamericana. Ya
sin el mismo plantel, en 2007, se quedó para cumplir con su contrato
y estuvo a un paso de meterse en las semifinales. Le tocó irse pero
nunca dejó Rafaela, pensó seriamente en quedarse a vivir para
siempre pero de todos modos regresa cada vez que tiene la chance de
hacerlo. Hoy es nada menos que el entrenador de la Selección
Argentina de Básquet, la misma que con el fuego aún de la
Generación Dorada, que el mismo empezó a construir, irá repleta de
ilusiones justificadas a jugar el Mundial de España dentro de
algunas semanas.
Es el Emperador, Julio César Lamas, el mismo que cada vez que nos
toca ver y charlar mantiene la calidez y humildad de aquellos
inolvidables años en la ciudad. Compartimos una mesa de café en la
localidad de San Vicente, hasta donde se llegó para colaborar con su
presencia en un partido solidario por el jugador Denis Gómez, y con
él charlamos del Mundial que se viene, de su vuelta a la Liga
Nacional pero también nos metimos por momentos en el Lamas que es
padre de familia y que extraña Rafaela. Una charla tan exclusiva
como plenamente agradable, de la cual DIARIO CASTELLANOS pudo
disfrutar intensamente y que decido compartirla con ustedes.
Rafaela, su lugar
Se fue queriendo quedarse se podría decir. A Lamas le costó
mucho tomar la decisión de no quedarse a vivir en Rafaela. Imposible
no charlar de la ciudad con un Julio que dice haber sido plenamente
feliz en Rafaela, que él y su familia la extrañan y que cada vez
que puede vuelve y la disfruta. “Yo estuve a punto de quedarme a
vivir en Rafaela. Ha sido un lugar que a mí me cayó como anillo al
dedo, fui muy feliz ahí y los integrantes de mi familia también.
Todos pudimos tener una integración social correcta, tanto como para
educar a mis hijos, para funcionar dentro de la sociedad y para
desenvolverme profesionalmente que fue para mí todo perfecto. Yo
creo que en el país Rafaela es una isla, que por la inmigración que
ha tenido es una ciudad que está por encima de la media por las
cuestiones de cómo la piensan y cómo la gestionan, los niveles que
tiene de seguridad, educación, limpieza, a mi me encantan, siempre
que vuelvo a Rafaela y camino por ahí, me siento en un lugar en el
que yo respeto y me siento respetado. No fue un lugar más para mí y
tengo un recuerdo imborrable de mi paso por Rafaela.”
Además, Julio nos habló de su familia, a la que
indefectiblemente vemos crecer con el paso de los años. “Mi hijo
mayor estudia en Buenos Aires, una ciudad que tiene una oferta
académica enorme, yo nací en Capital Federal así que me
desenvuelvo bien, mi hija más chica llegó con apenas un año allá
así que está plenamente adaptada y la del medio quiere volver todo
el tiempo a Rafaela (risas). Por eso cuando podemos volvemos, nos
hace bien”.
El Mundial, Manu y la ilusión argentina
No podíamos empezar a hablar de otra cosa con el DT de la
Selección. Julio nos dejó sus sensaciones sobre la confirmación de
GInóbili para estar en España pero la lesión queapareció luego y
el deseo optimista de cara a lo que viene. “La confirmación de la
participación de Ginóbili hace mejor al equipo, a sus compañeros y
ahora estamos esperando con mucho optimismo que su físico le permita
estar. Sabemos que no será sencillo, que más allá de su intención
y de haber confirmado hace unas semanas que iba a estar, tenemos que
esperar para saber si podrá estar o no en España. Él es un fuera
de series, de esos jugadores que hacen mejor a sus compañeros,
incluso al entrenador, es de esos elegidos que se cuentan con el dedo
de una mano y él es eso y por eso esperemos poder contarlo por más
complicada que asome la situación por esos momentos.”
Un plantel rico: Lamas fue más allá de Manu y también
habló del resto de los nombres fuertes del seleccionado. “Otros
jugadores muy importantes confirmaron su presencia y le hacen bien a
la selección, como los casos de Scola, Prigioni, Nocioni, Delfino,
que son parte de un grupo de jugadores inolvidables. Si bien quedan
menos de los jugadores de la Generación Dorada, todavía hay una
parte importante del corazón de ese equipo que estira su presencia
en la Selección Nacional, estos jugadores que se han entendido tanto
dentro y fuera de la cancha.”
Lugares vacantes: esperando por la evolución de Manu, como
por otras molestias físicas también, Julio nos contó de qué
manera completará el plantel para jugar el Mundial. “No sabemos en
qué condiciones están Carlos Delfino, que viene con una lesión de
tiempo, y Juan Gutiérrez, que viene con una complicación física, y
tenemos que esperar por esto también como por lo de Manu. Una vez
definido esto, se completarán las convocatorias con jugadores que
integran el equipo que disputará el Campeonato Sudamericano en
Venezuela.”
La preparación: también, Lamas dio detalles del trabajo
del seleccionado de cara a la Copa del Mundo. “El equipo del
Mundial empieza a entrenar el 24 de julio en Buenos Aires y el 14 de
agosto parte hacia Europa. Se van a jugar ocho partidos amistosos,
tres en Argentina de los cuales dos serán en Tecnópolis, el 8 y 9
de agosto en un torneo con México y Brasil y en el cual habrá diez
o más jugadores de la NBA involucrados y el luego nos vamos a Europa
para seguir con gira previa al inicio del Mundial”.
Julio Full Time
Tras un primer período en el que dividió sus horas de trabajo
entre la Selección y la Liga Nacional, desde hace un par de año
Julio se dedicó exclusivamente al seleccionado y le preguntamos cómo
desarrolló esa posibilidad. “Fue un tiempo muy útil.
Principalmente en cuanto a poder seguir a los jugadores que integran
el núcleo fuerte del equipo, visitarlos durante dos años y tener un
vínculo con ellos fuera del único mes en el que compiten con la
selección y evitar verlos un mes por año nada más porque es poco y
también muy importante para detectar y guiar a los nuevos jugadores
que van haciéndose un lugar en el equipo, como los casos de
Campazzo, Delía, Bortolín, Zafar, Mata y demás. Si bien las
consultas hacia mí se direccionan siempre sobre los mismos
jugadores, hay muchos otros nuevos en este proceso, si comparamos los
12 de Londres en los Juegos Olímpicos, con los 12 que vamos a ver en
España, va a haber muchas caras nuevas.”
El recambio necesario: algunos nombres fuertes de la
Generación Dorada felizmente visten aún la camiseta argentina pero
es necesario que aparezcan otros también y sobre eso nos habló
Lamas. “Campazzo (base que viene de ser nuevamente campeón de la
Liga Nacional con Peñarol de Mar del Plata) más que aparición, ya
ha sido una confirmación en el premundial de Caracas y a la
selección le haría muy bien que haya muchos más como Campazzo. No
es justo que podamos hacer una comparación con Ginóbili o con Scola
porque de ese modo nos veríamos todos muy perjudicados, pero sí que
aparezcan más jugadores que se animen a ir en busca de un lugar para
ellos en el equipo.”
Las expectativas y las obligaciones en el mundo
Básquet
Por los logros obtenidos, por el enorme Ginóbili que es un fuera
de serie y volvió a consagrarse en la Liga más importante del
mundo, y por varias razones más, la selección es cada vez más
exigida. Julio nos dio su punto de vista al respecto, dejó en claro
que esta selección no tiene deudas pendientes y que las presiones no
son tales como en el fútbol, al menos hasta que se empieza a jugar
el Mundial. “Al estar la camiseta Argentina de por medio todo el
mundo se ve incluido y se disparan mucho las expectativas. Este
equipo no tiene deudas pendientes, no es un equipo que lo intentó y
no lo consiguió, al contrario, es un equipo que a lo largo de 12
años fue cumpliendo objetivos varias veces. Nosotros tenemos un
contexto tranquilo de trabajo en lo previo, hasta que empezamos a
jugar el Mundial no vivimos una situación de tensión o de nervio
por tener deudas pendientes, después cuando empiezan los partido hay
una demanda permanente de resultados positivos siempre que intervenga
Argentina. De todos modos en el básquet hay un análisis más normal
de las situaciones, distinto a lo que pasa con el fútbol donde se
parte de un nivel de análisis más alocado e impulsivo y hasta casi
incoherente en algunos casos.”
La vuelta a la Liga Nacional
Una vez que finalice el Mundial de España, Lamas volverá a
dirigir en la Liga Nacional de Básquet y será nuevamente en Obras
Sanitarias. “La realidad es que mi contrato en la Selección
termina el 15 de septiembre o el último partido del Mundial y voy a
volver a la Liga Nacional, a dirigir Obra Sanitarias que es un club
donde noto que ellos están interesados en que yo sea su entrenador,
yo me siento de la casa y esa fue la principal razón por la cual
acepté el ofrecimiento y vuelva a dirigir en la Liga, cosa que me
pone muy contento”, manifestó Julio.
Cordial, amable, se apagó el grabador y la charla siguió, ahora
le tocaba a él preguntar por cómo andaban las cosas de uno. Asombra
cuando eso no debería pasar en realidad porque estamos frente a una
gran persona, un genio del básquet con el que tuvimos el honor y la
fortuna de poder compartir y aprender durante algunos años en el día
a día pero que hoy, más allá del tiempo, la distancia, el momento
y lugar que ocupe cada uno es el mismo Julio, ese que extraña la
ciudad y te invita a compartir la mesa para una charla, un café o un
momento distendido, algo bien de rafaelino.